Es una Novia infinita. Colmada de emoción y sobre todo, enamorada. Mucho.
Y en el esplendor de toda esta poesía andante, coronando el moño de su cabeza... Un AJO.
Porque un ajo puede concentrar el primer amor, ése q la envolvió en su más temprano contacto con este mundo...Su madre... Deslumbrante ser, de orígenes cubanos e italianos... extrafalaria, alegre, inspiradora... Siempre cantando y también siempre...Entre fogones.
- Malena... Un ajo guarda el elixir de esta vida, el sabor, la pasión, el acompañamiento... Y también te protegerá de los draculines... Y se quedaba así, un rato mirándola y como pensando. Y luego se perdía absorta entre sus canturreos, sartenes y cazos, creando un completo oasis para los sentidos.
Y Malena tal y cómo se lo prometió en aquel ultimo suspiro a su madre y que ésta, correspondió con una sonrisa, ahora abanderando la Vida, llevaba un ajo con ella siempre...
- Es la hora mi amor... Escuchó al otro lado de la puerta.
Sonrió emocionada al reconocer esa voz... Y feliz pensó...
-¡Vamos mamá!