No somos críticos de arte, ni lo pretendemos ser. Ya lo sabéis, nos gustan las cosas bonitas, las cosas que respiran belleza, que te regalan tiempo, que suspiran emociones. Quizás veamos cosas que otros no ven, quizás no veamos cosas donde otros las ven, pero eso nos da igual. Vamos, miramos, inhalamos, sentimos, reflexionamos y nos inspiramos.
Hoy os hablamos de Art Madrid, una Feria de Arte Contemporáneo, donde galerías de todo el mundo muestran obras de artistas diversos. Vamos sin expectativas. Vamos sin buscar nada. Simplemente vamos.
Y es una pena. Es una pena que hoy en día en los Telediarios sólo nos muestren esas obras absurdas, que no se distinguen de la basura o de lo que todos tenemos encima de la mesilla. Obras de precios astronómicos que sólo algún vulgar millonario con ansias de demostrar cultura pagará y que nos dejan indiferentes, nos apenan y nos hacen creer que alguien detrás de una cámara oculta se está riendo de nosotros. Sí, nos da pena, porque más allá de estas piezas (seguramente generadas con el único fin de salir en primera portada de la página del cultura de algún periódico) hay otras cientos que transcienden lo material, que te tocan el alma y que te dejan sin respirar durante algún microsegundo. Son éstas, las que te hacen buscar un asiento para detener el tiempo y admirarlas sin que tus piernas se resientan, las que nadie se debería perder.
Y por eso, aquí va una muestra de lo que hoy nos emocionó. Lo que hoy nos hizo mirar el nombre del artista y apuntarlo en una libreta para que las prisas de mañana no lo borren de nuestra memoria.
Hay infinitas formas de mirar el mundo. Hay infinitas formas de entenderlo. Pero cuando encuentras alguien que lo entiende y lo expresa de la misma forma que lo haces tú, algo se te mueve dentro. Ojalá estas pocas imágenes os remuevan de la misma forma que nos removieron a nosotros
En la siguiente galería os mostramos las que más nos tocaron el alma.
